3 antojos que pueden indicar que tienes un problema de salud

Siempre ha existido el mito de que los antojos comestibles son una manera en la que el cuerpo indica que tiene alguna carencia nutricional. Se suele decir que los antojos como el chocolate indican unos bajos niveles de magnesio. Es una creencia muy extendida pero es cierto que aún no hay evidencias que lo confirmen científicamente.

De hecho, hay una escasa evidencia científica que relacione los antojos con las deficiencias nutricionales y, además, ¿por qué motivo siempre que tenemos antojos, suelen relacionarse con algo dulce o salado?

Los antojos suelen estar ligados con alimentos ricos en grasas o carbohidratos y azúcares según muestran las investigacionesrealizadas. De esta manera, la industria alimentaria saca gran partido de ello tal y como podemos ver en la publicidad. Incluso la teoría del chocolate cae por su propio peso puesto que por ejemplo, las pipas de calabaza tienen mucho más magnesio que el chocolate y a nadie le da el antojo de comerlas. Incluso también se ha demostrado que personas que no tienen ninguna carencia nutricional de ningún tipo, tienen antojos de determinadas comidas.

Esto indica que estos antojos no significan carencias sino que la causa es de tipo psicológico.

El principal ejemplo es el de la pizza. Es algo que nos encanta y cuando tomamos esta comida basura nos sentimos bien. Esto se relación con las sustancias químicas que segrega el cerebro al ingerirla; muestra una respuesta de bienestar en periodos de estrés o nerviosismo, por ejemplo. Este bienestar es consecuencia de tener una dieta poco variada y monótona. Lo mismo sucede con alimentos como el chocolate o las hamburguesas.

A pesar de estas explicaciones e investigaciones que relacionan los antojos con nuestra psicología, también existen algunos que sí que pueden ser indicadores de que tenemos algún problema de salud. Os mostramos 3 de ellos:

• La necesidad de beber agua podría indicar diabetes

Tener demasiada sed (pero no aquella típica al salir del gimnasio) de manera continua a lo largo del día, podría ser un síntoma de diabetes, sobre todo al inicio de la enfermedad.

Esta sed excesiva suele llevar a un aumento en las ganas de orinar. Al tener diabetes se produce una acumulación de azúcar en la sangre lo que produce una sobrecarga en los riñones a la hora de filtrarlo.

Si los riñones no pueden con esa sobrecarga, el exceso de azúcar es enviado a la  orina (mayor frecuencia al miccionar) lo que nos deja con una sensación de sed más de lo normal.

• Los antojos de sal pueden relacionarse con la enfermedad de Addison

Los antojos por cosas saladas suelen ser muy comunes y no se relacionan con una necesidad del cuerpo. En los países desarrollado solemos ingerir mucha más sal de la necesaria en nuestra dieta. Sin embargo, esto es muy diferente en los atletas de alta competición, por ejemplo, quienes queman gran cantidad de calorías lo que hace que se pierdan sales durante su entrenamiento.

Para el resto de la gente normal, una ingesta excesiva de sales podría relacionarse con la enfermedad de Addison en la cual las glándulas supra-renales (glándulas situadas encima de los riñones) no segregan unas hormonas determinadas. Estas son fundamentales puesto que incluyen cortisol, que ayuda al cuerpo a hacer frente al estrés y la aldosterona que mantiene el equilibrio de la presión sanguínea. Si no se trata esta enfermedad de la manera correcta, se corre el peligro de que la presión sanguínea caiga a niveles peligrosamente bajos. Por lo tanto, si vemos que tenemos demasiados antojos con cosas saladas lo mejor es acudir al médico para hacerse una revisión.

• El antojo de hielo indica déficit de hierro

A veces tenemos antojos de cosas extrañas como sería ingerir hielo, que no tiene ningún valor nutricional. Por ejemplo también ocurre con el antojo de ingerir papel, arcilla e incluso tierra. Esto también se da en los animales como por ejemplo, en los perros. En los humanos aún no ha sido un principal objeto de estudio pero muchos antojos de este tipo suelen relacionarse con una falta de hierro en el organismo. Según un estudio reciente publicado en la revista Medical Hypotheses sugiere que el hábito que tienen algunas personas de meterse compulsivamente cubitos de hierro en la boca y masticarlos es una señal de que el cuerpo aumenta el flujo sanguíneo hacia el cerebro para combatir un cierto cansancio causado por una deficiencia de hierro.

Estos son algunos de los ejemplos que pueden indicar algún problema de salud relacionado con la ingesta de determinados alimentos e incluso ciertas situaciones a las que no les damos importancia en el día a día. Por ello, siempre que tengamos algún indicio extraño relacionado con antojos, lo mejor es acudir al médico.

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