Realidad y mitos sobre el alargamiento de pene
Existen muchos mitos acerca del alargamiento de pene. En este artículo pretendemos mostrar qué tienen de cierto o de falso algunos de los mitos más comunes a los que se enfrentan muchos hombres con este complejo con su virilidad. Aunque siempre hay mitos nuevos que vienen y van, fruto de curiosidades como que los alemanes lideran el ranking en alargamientos de pene, ¡Entérate!
Mito 1. No hay verdad o ciencia alguna detrás de cualquiera de los métodos para alargar el pene
No todos lo métodos conocidos para el alargamiento de pene son estafas. A diario recibimos cientos de correos electrónicos que van derechos a la carpeta de spam, y que prometen milagros usando aceites de serpiente que por desgracia no sirven
absolutamente para nada. Se deja a un lado la ética médica, con falsas fórmulas milagrosas que pueden conseguir alargar el pene.
Sin embargo hay métodos que han demostrado su eficacia, al usarse comúnmente dentro de la comunidad médica. Los conocidos alargadores de pene, tiene algo de cierto. Y lo cierto es que hay un porcentaje de eficacia probada. Lo que ahora se conoce como alargador de pene, fue en sus inicios un artilugio diseñado por la comunidad médica, en concreto por urólogos, que operaban problemas asociados al pene de los hombres que padecía la enfermedad del Peyronie. Esta enfermedad hace referencia al problema del pene curvo, que es una acumulación de grasa en una de las paredes del cuerpo cavernoso del pene. Una vez operado el pene, durante el proceso postoperatorio, se usaba el artilugio para mantener el pene en una posición fija hasta su completa curación. El resultado fue que además de lograr una posición recta del pene, se consiguió alargar el pene varios centímetros. Y ¿cómo se consiguió alargar varios centímetros el pene de estos hombres? Fácil explicación. La piel que recubre el cuerpo cavernoso del pene, es elástica, y sometida a una presión puede ver alterado su tamaño original. Al ver este tipo de resultados, muchas empresas empezaron a mostrar interés en patentar este artilugio y venderlo al público masculino para alargar el pene.
Pero ante este proceso para alargar el pene, existen varias premisas a tener en cuenta. Este artilugio solo ha logrado ser eficaz en casos en los que el pene mide como mínimo 8 centímetros. Por otra parte, el pene puede ver alterado su tamaño en cuanto al largo, pero el grosor no aumenta. Y por último, para que el efecto del extensor permanezca, hay que tener en cuenta una serie de ejercicios para el pene, que realizados periódicamente, pueden conseguir varios centímetros de más en el miembro viril.
Mito 2. El Gobierno no regula este tipo de productos para alargar el pene
Muchas veces la gente se pregunta porqué el gobierno no toma medidas ante las afirmaciones falsas y 
las promesas para alargar el pene. Lo cierto es que hay productos que sí tienen una serie de denuncias legales ante este tipo de productos. Existen empresas que hacen falsas promesas que despiertan el interés y acaban por convencer a aquellos hombres acomplejados por el tamaño de su pene. Sin embargo, sí que existen productos regulados legalmente y que cuentan con la aprobación de la Comunidad Médica, así como certificados de eficacia de la Comunidad Europea.
A la hora de buscar información acerca de este tipo de productos hay que estar bien informado de todos los informes de calidad y de su certificación, para no caer en el juego de los falsos milagros. Por otra parte, hay que informase del compromiso de calidad y de devolución del dinero en caso de no estar satisfecho con el resultado.
Mito 3. Las píldoras para alargar el pene no funcionan
En primer lugar, el tamaño de un pene en reposo, no tiene que ver con el tamaño del un pene erecto. Algunos hombres que tienen penes pequeños pueden llegar a ser muy grandes y otros hombres con un pene más grande no cambian mucho en estado de erección. Según varios estudios realizados a nivel mundial, un pene erecto normal mide entre 10 y 15 centímetros. Aunque puede haber variaciones, obviamente.
Existen productos en formato de píldoras o pastillas para el alargamiento de pene regulados por la comunidad médica, que sí funcionan realmente y que tienen un efecto en el miembro viril. El efecto que producen este tipo de productos es que mejoran la irrigación sanguínea en el pene, lo que ayuda a agrandarlo en lo que se refiere al grosor. Es decir, las píldoras en sí, no hacen que el pene se alargue por sí solo, sino que provocan un agrandamiento en el diámetro del miembro. Algunos de los productos que mejor funcionan para este tipo de efectos es el compuesto Bioperine, presente en algunos productos como Sizegain Plus.
Mito 4. Las bombas de vacío es un método seguro para el alargamiento de pene
La técnica de usar las bombas de vacío, conocida popularmente como “la bombita”, comenzó a popularizarse en los años 90. Su función es únicamente para tratar la disfunción eréctil (impotencia) y no otros aspectos sexuales, como puede ser intentar alargar el miembro viril.
Este método consiste en que se succiona la sangre para que entre al pene y, de esta manera, se consiga una erección. Lo cierto es que podrás sentir tu pene más grande de lo normal con esta gran erección, pero no es permanente, ya que cuando vuelva a estar flácido volverá a su tamaño natural.
De acuerdo a informaciones de expertos, está demostrado que si se usa con demasiada frecuencia el tejido elástico del pene puede verse afectado y causar serias lesiones en el pene, como rotura de fibras, e incluso infecciones y úlceras. Y además, incluso provocar o aumentar si ya tienes la disfunción eréctil.
Mito 5. Masturbación frecuente como técnica para que crezca el pene
La realidad es que el tamaño del pene depende de la genética del varón y por mucho que se produzcan más masturbaciones no hará que crezca más. Pero si algo está demostrado con la masturbación frecuente, es que puede ayudar a reducir la depresión al liberar endorfinas que se producen durante el orgasmo y además a mejorar el sistema inmune.
Mito 6. Estiramiento del miembro después de orinar lo hará crecer
La ‘manía’ de muchos hombres de estirarse el pene cuando acaban de miccionar no tiene garantías de que vaya a servir para que el pene se vea más grande. El ‘bulo’ que hay al respecto es muy grande, pero sin base científica ni médica.
Mito 7. La viagra hace que aumente el tamaño del pene
Muchos hombres piensan que los medicamentos dirigidos a personas con disfunción eréctil, como el Viagra o el Cialis ayudan a que el miembro aumente su dimensión. Esto es totalmente falso, pues estas pastillas lo único que hacen es que aumente transitoriamente el flujo de sangre al pene, ayudando a que se produzca una erección. Como en el caso de las bombas de vacío, pudieras ver que el pene parece más grueso y largo que en anteriores ocasiones, pero se trata de algo sólo momentáneo.
Mito 8. El tamaño del pene puede cambiar si pierdo peso
Si tienes exceso de peso, entonces puedes perder algunos kilos y tu pene parecerá más grande. Algunos hombres con exceso de peso, o incluso en casos de obesidad, han logrado ver mejoría en el tamaño de su pene, tras perder peso. En este caso, no es que el pene aumente de tamaño, sino que el hecho de perder peso, provoca una pérdida de peso de la zona abdominal, y con ello, la zona peneana sale a la luz, por decirlo de alguna forma.
Mito 9. La única solución para alargar el pene es la cirugía
Hay que aclarar que existen diferentes procesos quirúrgicos para el alargamiento de pene: Aquellos que se basan en el alargamiento y aquellos que se centran en el grosor, aunque a menudo se combinan en una misma intervención.
El proceso quirúrgico para alargar el pene, denominado faloplastia de aumento, es una técnica no compleja que consiste en la sección del ligamento suspensorio del pene. Aunque es aparentemente sencillo no está exento de complicaciones, como alteraciones en la sensibilidad del miembro. Por lo general, y en el mejor de los casos, se consigue un crecimiento entre 1 y 3 centímetros en reposo.
Esta técnica suele estar complementada con el uso de extensores, ya que la retracción que produce la cicatrización puede provocar el efecto contrario, pues la formación de una cicatriz excesiva puede ocasionar que la parte descubierta del pene se vuelva a meter hacia dentro durante la fase de curación. También pudieran surgir ciertas complicaciones, como hematomas e infecciones, alteraciones en la sensibilidad o incluso disfunción eréctil.
En cuanto al método que aumenta el grosor la operación pasaría por la inyección de PMMA, silicona u otros compuestos en el cuerpo del pene. En este caso siempre hay que realizar previamente una cirugía de circuncisión.
Post-operación de la cirugía de alargamiento de pene
La intervención no es dolorosa. Se realiza con anestesia loco-regional y el alta suele darse entre las 12 y las 24 horas después de la operación salvo que surjan complicaciones mayores.
El post-operatorio suele ser bastante sencillo, pero para según que personas algo difícil de seguir: Abstinencia sexual durante aproximadamente un mes. Es muy importante un reposo adecuado para facilitar el prendimiento de tejidos y evitar así su desplazamiento.
Otras de las indicaciones que suelen recomendar encarecidamente los cirujanos es no ducharse en los próximos tres o cuatro días y renunciar a hacer deporte durante cuatro o cinco semanas.
La mayoría de los hombres que se someten a la cirugía de alargamiento de pene, lamentan hacerlo. El tema de la cicatrización y el dolor es un motivo más que de sobra para evitar pasar por este tipo de alternativas.
Hay otras soluciones válidas para alargar unos cuantos centímetros, sin tener que pasar por el quirófano.
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Están compuestas de productos totalmente naturales y nutrientes que que potencian la efectividad de todos componentes.
¿Es posible conseguir un alargamiento de pene mediante ejercicios?
Otro de los métodos más conocidos para conseguir un alargamiento de pene son los ejercicios que se pueden hacer en casa para conseguir unos centímetros de más. Por eso, queremos mostraros algunos de los ejercicios caseros para mejorar la circulación de la sangre del pene y poder así alargarlo algo más.
Pasos previos
Coloca una compresa o toalla impregnada en agua caliente: toma una toalla o compresa y sumérgela bajo el grifo a temperatura caliente. Durante unos minutos, cubre el pene por completo. La idea de esto es que se produzca una dilatación en los vasos, lo que incrementará los resultados de los ejercicios que se realizarán a continuación.
Aplicar lubricante: es fundamental que no olvides usar lubricante y así evitarás irritaciones. Usa los que son a base de agua, los mismos que puedas usar para tener relaciones sexuales. Por supuesto, descarta la idea de sustituirlo con jabones o aceites, pues no están hechos para tener un contacto prolongado con la piel y menos el área del pene, que es mucho más sensible que la del resto del cuerpo.
Elige un lugar adecuado, tranquilo y alejado del ruido donde no recibas interrupciones. Calcula que de media necesitarás unos 20 minutos para realizar el ejercicio.
Tipos de ejercicios
1. Ejercicio estiramiento para un pene más largo: Utiliza el dedo índice y pulgar para formar el símbolo de ‘OK’ y agarra firmemente la punta del pene. Estíralo hacia delante durante 10-15 segundos. Después sacúdelo para restaurar el flujo de sangre. Repita este movimiento pero con el pene hacia arriba, derecha, izquierda, arriba y abajo. No olvides sacudir el pene entre cada repetición para así restablecer el flujo sanguíneo.
2. Ejercicio para hacer el pene más grueso: El método ‘Jelquing’, también denominado de ‘ordeñamiento’ consiste en apretar y estirar el pene con las dos manos para así empujar la sangre desde la base hasta la cabeza. De esta forma se estaría forzando a que el tejido esponjoso del pene se expanda.
No olvides agarrarlo en ‘OK’ tras haber obtenido una erección media. Firmemente y suavemente mueve la mano a la cabeza del pene. En el momento de llegar a la cabeza del pene, cambia de mano. Hazlo durante 100 repeticiones en la primera semana, 125 la siguiente e ir añadiendo sucesivamente 25 cada semana. Cuando llegues a la cuarta semana (o lo que es lo mismo, 200 ejercicios), dejarlo así. Al igual que el pene estiramiento, después de cada sacudida restablece el flujo sanguíneo.
3. ¿Quieres erecciones más fuertes? Prueba PC Flex: El músculo que controla el flujo de orina, el pubococcigeo (PC) es muy importante a la hora de tener erecciones sólidas. Localiza este músculo cuando orines, sólo tienes que detener el flujo y ese músculo que funciona en ese momento es el PC. Para realizar el ejercicio es apretar el pene durante 5 segundos y soltar. Al principio haz 50 repeticiones al día y ve aumentando en 20 cada semana. En pocas semanas comprobarás que las erecciones son mucho más fuertes.
