6 cosas que hacer en verano
La primavera se está acabando. Los pájaros cantan, aparecen ya las primeras mariposas y el sol comienza a brillar con mucha más fuerza. Muchos nos pasamos la primavera y el verano sin ver casi el sol, recluidos y temblando de frío en lugares cerrados con aire acondicionado. Y no hay razón alguna para esconderse del sol como lo hacemos ahora, ¡más bien ha llegado el tiempo de darle las gracias! ¿Cuáles son las cosas que hacer en verano de las que podemos aprovecharnos los próximos meses?
Nos levantamos cuando el sol todavía no ha salido o está a punto de hacerlo y volvemos a casa cuando se está poniendo al final de la tarde. En vez de vivir sin ser realmente conscientes de su existencia, deberíamos maravillarnos con él y aprovechar para beneficiarnos de sus potentes rayos.
Aquí hay seis formas de beneficiarnos del sol, para poner en práctica cuanto antes y siempre que podamos:
1. Andar descalzos al aire libre
Es indescriptible la sensación de placer que produce el sentir el calor de los rayos del sol de primavera o durante las primeras horas del día en verano, pero es más indescriptible aún sentir los rayos del sol en las plantas de los pies. Andar descalza pisando la hierba es otra forma de sentir los beneficios de los rayos solares y darles las gracias. Además, proporciona una fantástica sensación de libertad.
2. Prepárate una jarra de té solar
En verano, no hay nada mejor que un vaso de té helado recién hecho. Hay una forma de ayudarnos del sol para preparar el té helado veraniego con ayuda del gran astro: pon algo de agua a hervir y luego en una jarra grande añade unas bolsas de té y unas cuantas hierbas aromáticas a tu gusto para darle algo de sabor de verano: por ejemplo, menta, hierba de limón o lavanda. Coloca la jarra al sol y deja que penetren en ella sus rayos. Cuando el té alcance el color que te gusta, retira la jarra del sol y métela en el frigorífico. Habrás creado tu marca personal de té helado….al sol.
3. Activa los cristales curativos del sol
Se piensa que muchos minerales cristalinos tienen poderes curativos y que cada uno de ellos tiene su energía específica. Pueden usarse para paliar dolores de cabeza, problemas de insomnio o trastornos de la mente. Si adquieres alguno de estos cristales, es importante limpiarlos bien para que podamos beneficiarnos de todo el efecto potenciador de los rayos solares.
Coloca los cristales afuera o en la ventana muy temprano, para que puedan absorber la luz solar de la mañana. También los puedes colocar fuera durante la noche para que absorban la potencia de la luz de la luna. Tanto la luna como el sol pueden usarse para recargar, activar y limpiar tus cristales, para que a éstos su vez, te recarguen, reactiven y te limpien a ti en tu interior.
4. Dale las gracias siempre que puedas.
Si estás en un atasco, en vez de enfadarte, aprovecha la parada en el tráfico para sentir la potencia beneficiosa de los rayos solares y dale las gracias al sol por ellos. Cada día, el sol vuelve a salir y no importa lo que nos ocurra, nos evidencia diariamente que estamos vivos, algo por lo que debemos estar siempre agradecidos, En países con poco sol, como los escandinavos, hay una gran festividad a mediados del verano llamada Midsommer – el solsticio de verano- del que se dice que es mágico y en la que se da gracias al sol y sus beneficios y gracias la vida, que es posible solo con sus rayos.
5. Practica yoga al aire libre
En el yoga, los saludos al sol constituyen una forma de mostrar respeto al mismo. Cada saludo al sol en el yoga comienza y termina con tus manos giradas hacia el corazón porque cada uno de nosotros llevamos el sol en nuestro corazón.
Se comienza sentados en posición de yoga sobre la esterilla, con las manos sobre el centro del corazón. Nos inclinamos hacia delante, para descargar nuestros hombros del estrés que nos produce el mundo. Luego, levantamos la espalda y la colocamos en posición vertical. Con las manos planas sobre la esterilla, levantamos lentamente las piernas y tiramos de los pies para atrás. Después, juntamos las plantas de los pies y bajamos poco a poco las rodillas. Con los codos sobre el pecho y las manos juntadas al cuello, nos echamos poco a poco para atrás sobre la estera. Repetimos el ejercicio varias veces, siempre comenzando y terminando con las manos sobre el corazón, sintiendo como el sol baña e inunda nuestro cuerpo.
Si cada mañana nos tomamos un momento para dar gracias al sol de esta manera, realmente aprenderemos a darnos cuenta de su importancia y de sus beneficios y de lo importante que es para nuestra vida … y para la vida en todo el universo.
6. Disfruta del sexo
El verano es el mejor momento para poner en práctica todas aquellas fantasías que siempre han pasado por nuestra cabeza. La noche veraniega es mágica y da mucho juego para poner a prueba todos los sentidos con tu pareja, bien sea bajo las estrellas, en la playa, en la piscina o en cualquier lugar en el que la temperatura suba sola. Por ello, os recomendamos alguno de nuestros productos estrella para mejorar tus relaciones como por ejemplo:
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