La dieta Detox y cómo perder peso de manera equilibrada

Muchas veces olvidamos que la palabra dieta debe estar seguida por equilibrada, no por relámpago, o milagro. Una dieta equilibrada consigue que la persona que esté implicada en ella consiga bajar peso sin alterar su organismo. Por eso debemos analizar la famosa dieta Detox, supuestamente una dieta depurativa que debería ser un complemento dietético.

La dieta Detox consiste en tomar zumos y agua durante una semana o a veces más. Estos zumos han causado públicamente desmayos y afecciones serias de famosas que practicaban esta dieta «milagrosa». La verdad sea dicha, ojalá todos tomásemos esa cantidad de vegetales y frutas al día, pero no podemos limitarnos solo a esa ingesta. Por eso en Más que Salud hemos decidido analizar los efectos reales de la dieta de los zumos, mientras la persona que la sigue solo ve que adelgaza sin ningún problema aparente.

Fases de la dieta Detox

Una de las ventajas de la dieta Detox es que está hecha a prueba de hambrientos; una vez que tomas tu primer zumo, todo el azúcar de la fruta consigue paliar las señales de hambre que emite el cerebro. Esto ocurre por una reacción en el páncreas que genera insulina para transportar el azúcar que corre abundante por las venas, teniendo lugar un sobre esfuerzo del mismo.

Entonces, las células absorben la glucosa de la sangre, y al ser una de las pocas cosas que tienen que absorber tu cuerpo, sufre una bajada de azúcar considerable, provocando mareos o sensación de debilidad, por eso no está recomendado practicar ejercicio durante esta dieta. Aparece el glucógeno, energía derivada del azúcar que se almacena en los músculos y en el hígado, saturándolos, pero dotándolos de energía momentánea, que pronto se consume.

Después de un par de días, tu páncreas genera insulina tras el primer sorbo de cada zumo; como tu cuerpo ya se ha acostumbrado al proceso, el glucógeno se asimila casi instantáneamente. El cuerpo recurre a los triglicéridos, un tipo de energía almacenada tras mucho tiempo en tu organismo y proteínas de tus músculos, (de ahí la pérdida de peso) pero se debe en su mayoría a una pérdida notable de masa muscular.

Tras pasar el ecuador de la dieta, el cerebro empieza a alimentarse de la energía restante en el cuerpo; las cetonas, otro tipo de grasa, que no es muy recomendable para el organismo de forma continuada. Puede que el estado de humor también se vea afectado. Entonces comienza el efecto cetogénico, en el que tu orina comienza a ser diferente ya que de los músculos la sangre solo filtra amoniaco y ácido úrico. Ahora, tus riñones trabajan día y noche para desintoxicarte de esta aparente ‘desintoxicación’ a base de zumos.

Consiguiendo finalmente que tu cuerpo esté lleno de toxinas. Por supuesto, la pérdida de peso es notable, aunque también pierdes vitalidad.

¿Qué alimentos permite una dieta Detox?

Las dietas Detox suelen basarse en vegetales y frutas, que se suelen combinar en zumos y preparados, además de una gran cantidad de líquidos, como agua e infusiones. A continuación te enumeramos los alimentos permitidos:

• Futas: naranjas, aguacates, arándanos, kiwis, plátanos y fresas.
• Verduras: soja, alcachofas, espárragos, brotes de bambú, berenjenas, brócoli, col de bruselas, ajos, cebollas, col rizada, perejil, espinacas, tomates, lechuga, rúcula, zanahorias, coliflor y apio.
• Frutos secos: cacahuetes, almendras y nueces.
• Cereales: avena.
• Legumbres: lentejas, garbanzos y alubias.

Expertos en la materia recomiendan que si el tiempo que nos exponemos a la dieta es superior a 3 días, añadamos un extra alimenticio como huevos duros, pescados azules, queso fresco o tofu.

Recetas de zumos en una dieta Detox

Te damos ideas para elaborar tus combinados y  conseguir que los zumos de la dieta Detox sean ricos y variados. Aquí, las recetas estrella:

• Aunque puedes tomar zumo de naranja únicamente, nuestro consejo es que le añadas medio limón exprimido. Un sabor mucho interesante. También hay otra variante donde la naranja es el ingrediente principal: consiste en añadir además calabaza, pomelo y mango.
• Zumo especial de fresas con arándanos. El sabor más silvestre en tu vaso.
• Zumo de piña y jengibre.
• Zumo verde, hecho como espinacas, apio, manzana medio limón exprimido y agua.
• Zumo de brócoli, al que podrás añadir zanahoria, apio y agua.
• Zumo de frutos secos, con leche de almendras, nueces y cacahuetes.
• Zumo de pepino, limón y menta.

Consejos para realizar bien una dieta Detox

• Un requisito básico para empezar una dieta Detox es que no te guíes por las modas, pues no todas las dietas encajan con todo el mundo. Pruébala unos días pero si observas que algunos síntomas de la dieta no te están sentando bien, no fuerces la situación y abandónala de inmediato. Hay a ciertas personas que la dieta Detox le causa mal humor, irritabilidad e incluso depresión. Otros muestran síntomas de estreñimiento. Si muestras algunas de estas señales, valora si merece la pena seguir con esta dieta o probar una diferente.
• No tienes por qué hacer una dieta Detox estricta, pues no hay una cura de desintoxicación estándar. Mientras que algunas personas creen que sólo les funcionará si durante este periodo se alimentan únicamente de zumos, otras únicamente deciden restringir el alcohol, la cafeína, los alimentos refinados o procesados y la proteína animal. No existe una opción mejor que otra. Los nutricionistas incluso avisan de que es más fácil de tolerar una opción menos agresiva que una con tanta limitación de alimentos.
• No practiques ejercicio en los días de la dieta. Es mucho más fácil seguirla si esos días, ya de por si difíciles por el plan alimenticio, te das un descanso de la rutina habitual de ejercicio físico para no producir agotamiento en tu día a día.
• Puedes aprovechar estos días de dieta Detox para sumarte a un plan continuo de dieta saludable. Será una transición, así que mira esta dieta como la puerta de entrada a una nueva vida (alimenticiamente hablando).

Efectos secundarios de una dieta Detox

Eliminar grupos de alimentos tan importantes, como pueden ser hidratos de carbono, cereales o lácteos, en periodos de tiempo tan prolongados, puede traer consecuencias nefastas especialmente en determinados sectores, como adolescentes, embarazadas o personas mayores. Igualmente, pueden surgir problemas, como mencionábamos más arriba, como apatía, cansancio, náuseas o dolores de cabeza.

Independientemente de tu edad o tu condición, se recomienda usar durante estas dietas suplementos alimenticios con supervisión de un médico. Así evitarás alteraciones metabólicas severas.

Ejemplo de una dieta equilibrada para perder peso

Gracias a estos sencillos consejos, conseguirás reducir el contenido calórico de tu dieta, oscilando en una ahorro de 500-750 calorías por día.

Cuestión de tamaño: acostúmbrate a comer en platos de un tamaño mediano o pequeño. Este truco es muy antiguo. Así conseguir echarte menos en el plato, y aún así el plato está lleno.

Come mal pero en casa: si te gusta hincharte a patatas fritas, nachos, palomitas, hamburguesas y salsas, es muy sencillo: hínchate pero en casa. Todo lo que esté cocinado dentro de tu hogar será, como mínimo, un 25% más sano que en un restaurante o de fabricación industrial; la diferencia entre las preciadas grasas buenas y las demoníacas grasas malas. Imagínate si además vigilas lo que compras y utilizas ingredientes bajos en grasas o ricos en fibra.

Pide pizza de verduras: hazte aliado de las verduras. Para los planes caseros, pedir pizza o cocinar pasta es perfecto. Si quieres engordar menos, pide pizza de verduras de masa fina, o sustituye los espaguetis carbonara por unos arraviata, o cualquier receta que incluya bacon, nata y queso.

Frutos secos en pequeñas dosis: considera a partir de ahora los frutos secos como una pastilla vitamínica diaria. En pequeñas dosis son muy beneficiosos para el organismo, pero son adictivos, y conocemos tus debilidades, Su alto contenido en grasas (buenas) nos hace recomendarte que huyas de las sentadas de frutos secos, pistachos, nueces, avellanas, cacahuetes… ¡Es peligroso!

Ensalada verde, pero verde de verdad: es uno de los platos más peligrosos, puesto que desde el abuso de la cantidad de aceite y de sal, hasta los complementos como el aguacate, el queso, el bacon, y otros… pueden convertir una ensalada, símbolo de las dietas, en una bomba de relojería a punto de estallar. Permítete un capricho sabroso en la ensalada, pero no te pases.

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