¿Qué son y cómo se tratan las hemorroides?
¿Qué son las hemorroides?
Las hemorroides son venas hinchadas en el canal del ano. Es un problema común que puede ser doloroso, pero normalmente no es serio.
Las venas pueden hincharse dentro del canal del ano para formar hemorroides internas o pueden hincharse cerca de la apertura del ano para formar hemorroides externas. Se pueden tener las dos al mismo tiempo. Los síntomas y el tratamiento dependen del tipo que tengas; por lo general puedes seguir muchas formas de eliminar las hemorroides de forma natural, dependiendo de la gravedad.
Mucha gente tiene hemorroides en algún momento.
¿Qué causa las hemorroides?
Las hemorroides aparecen debido a que hay demasiada presión en las venas de la pelvis y en el área rectal.
Normalmente, el tejido interno del ano se llena de sangre para ayudar al control de las heces. Si presionas para la deposición, el aumento de presión provoca que las venas de estos tejidos se hinchen y estiren. Esto puede causar hemorroides.
La diarrea o el estreñimiento también pueden llevar a un aumento de presión en las venas del canal del recto.
Las mujeres embarazadas pueden tener hemorroides durante los últimos 6 meses de embarazo. Esto se debe al aumento de la presión de la sangre en los vasos sanguíneos del área de la pelvis. Hacer fuerza para empujar al bebé durante el parto puede empeorar las hemorroides.
Tener sobrepeso también puede acarrear hemorroides.
¿Cuáles son los síntomas de las hemorroides?
Los síntomas más comunes, tanto de hemorroides externas como internas, incluyen:
- Sangrar durante la defecación. Puede que veas tiras de sangre roja en el papel higiénico después de hacer presión para ir al baño.
- Picores
- Dolor rectal. Puede ser doloroso limpiar la zona anal.
Tipos de hemorroides
Hemorroides internas
Cuando tienes hemorroides internas puedes ver tiras de sangre en el papel higiénico o en la taza del baño después de hacer de vientre con normalidad. Puede que veas sangre en la superficie del excremento.
Las hemorroides internas normalmente son venas pequeñas hinchadas en las paredes del canal del recto. Pero pueden ser grandes venas hundidas que sobresalen y aprietan los músculos anales. Pueden ser muy dolorosas si el suministro de sangre de la hemorroide se corta. Si las hemorroides sobresalen, puede que también veas moco en el papel higiénico o en las heces.
Hemorroides externas
Las hemorroides externas pueden irritarse y coagularse bajo la piel causando bultos muy dolorosos. Esto se llama una trombosis o hemorroide coagulada.
¿Cómo se tratan las hemorroides?
Tu médico de cabecera puede decirte si tienes hemorroides preguntándote sobre tu salud anterior y realizándote un examen físico.
Puede que al principio no necesites muchas pruebas, especialmente si eres menor de 50 y tu médico piensa que tu sangrado rectal puede deberse a hemorroides. Tu médico quizás sólo examine tu recto con guantes o bien utilizando una pequeña linterna para mirar en el interior de tu recto.
El sangrado rectal puede ser un síntoma de algún problema más serio como cáncer de colon, rectal o anal. Por eso si el primer examen no muestra con claridad lo que causa tus problemas, tu médico puede utilizar una pequeña linterna (sigmodoscopio) para mirar en el primer tercio de tu colon o puede realizar una colonoscopia para poder ver el colon entero y comprobar las causas del sangrado.
Tratamiento MásQueSalud
Para la mayoría de hemorroides internas lo único que necesitas son remedios caseros. Esto incluye añadir fibra a tus comidas progresivamente, beber más agua y dejar de rascarte. También puedes usar un suavizante de deposiciones. Estos mismos remedios caseros también pueden utilizarse para la mayoría de las hemorroides internas.
Si tienes varias hemorroides internas, quizás necesites otro tratamiento. El médico puede tratar las hemorroides con bandas de goma o rascando el tejido alrededor de las hemorroides. Estos tratamientos reducen el suministro de sangre en las hemorroides para que puedan encogerse y desaparecer.
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La cirugía para eliminar las hemorroides puede realizarse si el resto de tratamientos no funcionan.
Unos hábitos saludables pueden ayudarte a prevenir las hemorroides o a impedir que empeoren. Come alimentos que tengan mucha fibra, como frutas, verduras y cereales. También tienes que beber mucha agua y hacer mucho ejercicio.
