Trucos para sentirse bien: cómo estar guapa minuto a minuto
Cómo el bienestar interior realza tu belleza
No sabría encontrar la definición de un día perfecto. Para algunas es ese maravilloso y relajante día de playa. Otras dicen que simplemente un día fuera de casa, diferente a un día rutinario y habitual. Para muchas un día maravilloso debe constar de algo dulce o algo más bien salado o las dos cosas a la vez, según los gustos particulares. Hay millones de posibilidades de lo que es un bonito y perfecto día y cualquiera de ellas es válida.
Pero te vamos a proponer un tipo diferente de día a considerar como perfecto, un día centrado en aquellas cosas que sean resultado de tu esfuerzo por realzar tu aspecto – esa belleza visible como reflejo de tu bienestar o belleza interior. Según esto, un ‘día perfecto‘ no tiene que ser necesariamente una jornada que te aleje de la realidad y la rutina diarias. Puede ser perfectamente un día cualquiera en el que estés precisamente inmersa en esta rutina. Te proponemos un día de muestra, aderezado con algunos de nuestros consejos y trucos favoritos, para disfrutar de él y sentirte bien tanto por dentro como por fuera. Después de todo, las rutinas pueden ser también positivas porque son de efecto inmediato. El punto central del concepto que MásqueSalud quiere compartir contigo consiste en integrar con facilidad hábitos sanos y saludables en tu vida diaria, para saber cómo estar guapa, más que luchar a brazo partido para lograr asumirlos.
08.00 h.: adelántate al despertador
Es algo que se puede lograr tras 8 horas de sueño. Éste es el tiempo que nuestro cuerpo necesita normalmente para recargar sus baterías. Dormir es el mejor estimulante de las hormonas del crecimiento (las que produce el propio cuerpo siempre serán mejores que las obtenidas de una ampolla). Estas hormonas del crecimiento mantienen tu cutis terso y vibrante, además del hecho de que esté demostrado que ninguna de nosotras irradie una especial belleza con bolsas debajo de los ojos. Cuando te despiertes, tómate unos minutos para realizar un chequeo del estado de tu cuerpo. Céntrate en las pequeñas molestias y dolores que puedas sentir. No para hacer una lista de ellos, más bien para olvidarte de ellos ya que te van a distraer e impedir centrarte en lo importante del día que comienza. Después, haz unos pocos estiramientos. Concédele unos minutos a tu sangre para empezar a moverse, céntrate en tu respiración y prepárate mentalmente para el día que comienza. Mientras percibes las sensaciones que te transmite tu cuerpo, concéntrate en la gran tarea que vas a llevar a cabo en el día de hoy, cualquiera que sea.
08: 0h.(+ 20 minutos): sesión matinal de belleza
Algunas líneas maestras:
- En la ducha, aclara tu cabello con agua. Puedes lavarte el pelo con champú las veces que quieras, pero no es conveniente hacerlo más de tres veces a la semana. Asea bien todo tu cuerpo. Sacude y cepilla tu pelo para secarlo o usa tu secador, pero a temperatura fría. En todo caso, evita siempre aplicar al pelo calor de cualquier forma, ya que daña las cutículas del cabello. Lo óptimo para el pelo es usar un cepillo redondo -mejor todavía si es de cerda natural- que masajeará tu cabello y tu cuerpo cabelludo sin dañarlos. Y recuerda siempre: el cabello húmedo es más frágil que el seco.
- Lávate la cara con un jabón acondicionador que contenga vitamina B3 (niacina) y B5 (técnicamente, ácido pantoténico), vitamina E y ácidos alfa-hidroxy. Puedes combinarlo con un producto que contenga anti-oxidantes, como la ubiquinona o el ácido ferúlico. En cualquier caso, comprueba siempre la lista entera de componentes e ingredientes de todos los productos que vayas a usar para asegurarte que tu piel es compatible con todos sus componentes. También es conveniente usar un acondicionador de piel que te proteja de los rayos UV. De lo que se trata es de proteger la piel del rostro durante el día y aportarle nutrientes a lo largo de la noche.
- Utiliza desodorantes, no antitranspirantes. No es conveniente eliminar la función natural de la transpiración, aunque puntualmente puede hacer falte un desodorante para eliminar olores desagradables. Usa un antitranspirante sólo cuando tengas que ponerte una prenda delicada que pueda ser dañada por el sudor y únicamente admita limpieza en seco.
08:00 h. (+ 50 minutos): hora del desayuno
Lo mejor es que conste de cereales integrales, un poco de aceite de oliva, fruta fresca y algunas proteínas beneficiosas como la clara de huevo, que contiene biotina y buen nutriente de la piel. Otra opción para el desayuno es un bol de copos de avena cocidos. Para variar y no desayunar siempre lo mismo, puedes tomar en días alternos un yogur desnatado sin azúcar con frutos rojos frescos o un bol de cereales integrales con leche desnatada.
09:10h.: hora de tomar los suplementos
Los suplementos para la mañana deben incluir: media pastilla de multivitaminas (o una pastilla con al menos 500 unidades vitamínicas, 600 mg. de calcio y 200 mg. de magnesio), 600 mg. de aceite omega 3 (ya sea en gragea o en forma de aceite de hígado de bacalao o pescado) y 162 mg. de aspirina (si tienes más de 40 años sólo si te lo ha confirmado en médico). Tómate los suplementos con agua. Todas estas vitaminas y elementos apoyarán la salud de tu corazón y también tu bienestar mental. Los médicos dicen que lo que es bueno para el corazón también es bueno para el cerebro, tus funciones sexuales y tu piel (por ejemplo, previene las arrugas).
09.15h (+2 horas 15 min): aprovecha el tiempo que necesitas para desplazarte
Tanto si estás camino del trabajo o llevas a los críos al colegio, está claro que te pasarás un buen rato del día dentro del coche metida en el tráfico o en un medio de transporte público. Lo ideal desde luego sería ir andando. Pero ya que tienes que soportar el tráfico y los atascos, aprovecha el tiempo para hacer unos ejercicios Kegel, que consisten en ejercitar los músculos situados en la base de la pelvis y con los que se controla el flujo urinario, presionando y relajándolos. Cuanto más ejercites estos músculos, mejor será tu vida sexual.
Ya estás lista para tu infusión cafeinada matinal favorita (o ¿quizás te va más el té verde?). Si te tomas el café en una cafetería o bar y en plena hora punta de los desayunos en barra, en vez de contemplar las botellas en las repisas o al camarero que tienes justo enfrente, céntrate en asegurarte en que adoptas la postura correcta mientras estás de pie: espalda derecha, glúteos para dentro, hombros hacia atrás y las mandíbulas alineadas, asegurándote que la inferior y la superior no se tocan. Centrarse en cada momento del día – esa es la idea. Práctica este control de postura a diario (tanto si estás de pie como si estás sentada) y te sorprenderás de los cambios que se operan en tu apariencia externa y en tu bienestar general.
¿Te sientes bien contigo misma? Es de suponer que si has hecho todo lo que te hemos indicado hasta ahora, sí.
10:00 a.m. (+ 3 horas.): practicar la sonrisa
Manda un toque personal a cualquier persona a la que saludes o con la que hables, consistente en una bonita sonrisa. No una sonrisa postiza o forzada, sino una sonrisa honesta, sentida. Las personas afables y optimistas siempre terminan teniendo excelentes relaciones porque precisamente transmiten a los demás su propio bienestar interior.
12:30h.(+ 4 ½ horas): toca un tentempié a media mañana
Prueba con frutos secos o té verde (los polifenoles del té verde refuerzan la piel). Ambos no solo te hacen sentir bien, también contienen biotina que te ayuda a metabolizar grasas y carbohidratos. Compleméntalos con una manzana o una zanahoria – no hay nada como los blanqueadores dentales naturales.
13:30h. (+ 6 horas ½) : hora del almuerzo
Para el almuerzo tienes dos buenas opciones: o una ensalada vegetal, aliñada con aceite de oliva y vinagre y algo de salmón, que contiene carotenoides, que mejoran la elasticidad de la piel y previenen la aparición de arrugas. Alternativamente, puedes tomar una sopa (¡no crema!), que hace que los alimentos transiten más lentamente a través de tu tracto intestinal y por lo tanto, te mantiene saciada algo más de tiempo y así evitas ganar sobrepeso.
Importante: incluso si estás con prisas y bajo presión, practica el llamado slow eating o comida pausada. Es decir, come deliberadamente de una forma lenta y pausada, masticando y saboreando a conciencia. ¡No te va a llevar más tiempo!
Si te queda algo de tiempo después de la comida del mediodía, aprovecha para caminar un poco. Aplícate protección contra los rayos ultravioleta en cara, manos y resto de la piel expuesta antes de salir. Un poco de sol en tu piel ayuda a que genere la muy necesaria vitamina D.
17.00h. (+ 8 horas): fíjate por un momento en lo verde que tengas alrededor
Tanto si ya estás en casa o todavía en el trabajo, tómate un momento y céntrate en ‘lo verde’, es decir, los árboles, plantas y demás flora que puedas tener a tu alrededor. En cualquier caso, centrarse en observar por un momento la ‘otra’ vida de alrededor (en vez de seguir a los vecinos de enfrente en su rutina o a mirar lo que hacen tus compañeros de trabajo si todavía estás allí) tiene efectos relajantes, reconfortantes y te proporcionan también nueva energía si estás en pleno estrés. ¡Pruébalo! No solo eso, también notarás cómo este momentito de relax oxigena el ambiente en el que encuentras en ese momento.
20:00h. (+ 14 horas): un vaso de vino con la cena
Lo mejor es una copa de vino tinto. El vino tinto tiene efectos tremendamente beneficiosos para el sistema cardiovascular efectos que provienen del resveratrol contenido en la piel de las uvas y prolongan la vida celular. En cualquier caso, esa copita de vino acompañando una cena preparada con proteínas, mucha fibra y algo de aceite de oliva. En la cena, usa platos de tamaño pequeño para controlar el tamaño de las raciones. También es mejor que ese plato sea al menos en su mitad de verduras. Lo óptimo es cenar con la máxima antelación posible a la hora de acostarse para asegurarse así que los nutrientes, proteínas y calorías de tu comida se vayan digiriendo y no interfieran en tu sueño nocturno (o terminar depositándose en tus nalgas).
22:00h. (+ 14 horas 30 minutos): hora de relajarse, pero no completamente
Está bien que haya llegado la hora de tu programa o de tu hobby favorito, pero nada de tumbarse – permanece activa. Si puedes, sigue tu serie o show televisivo desde una bicicleta estática, una cinta de correr o haciendo cualquier otro tipo de ejercicio, incluso unos abdominales durante la publicidad. También puedes interactuar con la gente con la que estés mientras la pantalla no emita nada que realmente precise completamente de tu atención.
23:30h. (+15 horas 20 minutos): tu hora de acostarte
Prepárate para la cama con una concienzuda sesión de aseo personal. Lávate los dientes durante al menos 2 minutos. Lava y exfolia tu cutis (con una loción fragante o un jabón que no deje residuos) y usa un acondicionador cutáneo con vitamina A y C (recuerda que nutres tu cutis y piel de noche cuando los rayos solares no pueden desnaturalizar todas éstas vitaminas y elementos antioxidantes). Vete a la cama con luz suave y en una habitación más bien fresca –así te dormirás antes y tendrás un descanso reparador. No es muy recomendable pretender caer rendida en el acto no sin antes haber enviado a todo correr unos cuantos correos desde la misma cama y con la televisión encendida de fondo ambiental.
23:40h. (+15 horas 40 minutos): hora de tener sexo
Siéntete bien, siéntete guapa, siéntete bella y deseada. Cuéntale a tu pareja lo que te gustaría (y que él haga lo mismo).
En días alternativos (días, ¡no semanas!) puedes también leer en la cama unas páginas de vigorizante prosa.
23:42h. (+15 horas 2 minutos): …. es broma. Sigue con esta hoja de ruta
24:00h. (+16 horas 10 minutos): Sumérgete en el sueño
La energía que te ha dado el bienestar del día te facilita llevar a cabo una meditación tranquila que te también te ayudará a conciliar el sueño. Piensa en lo mejor que te ha pasado hoy. Y piensa que te quedan casi 8 horas antes de despertarte de nuevo y empezar otro maravilloso día lleno de energía. Ya no tendrás que preguntarte más veces cómo estar guapa.